1. Tus trabajadores se quejan del ruido o presentan cansancio más rápido

Cuando el ambiente es demasiado ruidoso, el cuerpo se fatiga, la concentración baja y la comunicación se vuelve difícil. Señales típicas:

• Los empleados levantan la voz para hablar.

• Hay confusión o errores operativos por “no escuchar bien”.

• Se sienten agotados antes de terminar la jornada.

Si esto pasa, ya hay una exposición sonora elevada que vale la pena evaluar.

2. Tienes maquinaria que vibra demasiado o transmite ruido por el piso o las paredes

Las vibraciones son un problema silencioso pero muy serio. Indican que:

• La máquina no está desacoplada.

• Se está transmitiendo energía a la estructura del edificio.

• Puede haber molestias en oficinas, pisos superiores o vecinos.

Equipos típicos que generan vibración excesiva: compresores, extractores, chillers, prensas, moliendas, tornos, ventiladores industriales.

Cuando la vibración se “pasa” a la estructura, ya es momento de un sistema de aislamiento acústico y antivibratorio.

3. Recibes quejas de vecinos o administración del parque industrial

Esta es la señal más evidente.

Si ya te han llamado la atención por:

• Ruido que sale por puertas o rejillas.

• Golpeteos o vibraciones en la noche.

• Zumbidos constantes.

Entonces necesitas una evaluación acústica profesional. En Colombia (y la mayoría de países) hay normativas que regulan el ruido en zonas industriales, comerciales y residenciales. Ignorarlo puede traer sanciones, multas o incluso detención de actividades.

4. Operas durante la noche o haces procesos continuos

Las empresas 24/7 son más susceptibles a generar conflicto con su entorno. De noche:

• El ruido se percibe más fuerte.

• Las normas son más exigentes.

• Los dormitorios cercanos se afectan rápidamente.

Si tu operación incluye turnos nocturnos, necesitas revisar tus niveles sonoros y definir medidas de control.

5. Tienes máquinas nuevas (o viejas) que no fueron instaladas con criterios acústicos

En muchos negocios la maquinaria se instala solo pensando en producción… y no en el impacto sonoro.

Esto se nota cuando:

• El cuarto de máquinas retumba.

• El ruido “se riega” por toda la nave.

• Se siente un zumbido continuo incluso lejos del equipo.

• Los paneles o láminas metálicas vibran.

En estos casos, un diseño acústico puede incluir encapsulados, barreras, aislamiento estructural o amortiguadores especiales.

6. Los niveles de ruido superan lo permitido por ley

Aunque no hagas mediciones todos los días, hay síntomas que indican niveles altos:

• Te cuesta oír tu propia voz cerca de la máquina.

• Necesitas protección auditiva en más de la mitad de la planta.

• Las reuniones o instrucciones deben hacerse lejos de las máquinas.

Es probable que los niveles excedan los límites permitidos y requieran medición certificada y un plan de mitigación.

Qué hacer si identificaste uno o varios puntos

Si reconociste alguna de estas señales, lo más probable es que tu empresa ya necesite un estudio de control de ruido y vibraciones. En Frequenza podemos ayudarte a:

• Medir ruido y vibración con equipos certificados.

• Identificar las fuentes críticas.

• Diseñar soluciones estéticas, seguras y efectivas.

• Implementar encapsulados, barreras, silenciadores y sistemas antivibratorios.

• Cumplir normativa y evitar sanciones.